miércoles, 29 de mayo de 2013

Blancanieves

Pablo Berger, 2012




Interesante revisión del clásico cuento infantil pasado por el tamiz de la cultura popular más castiza. Olé.

miércoles, 22 de mayo de 2013

A propósito de Schmidt

About Schmidt
Alexander Payne, 2002


Me ha gustado mucho. Alexander Payne no tiene piedad, es un puto genio. Si en Election (1999) hacía una radiografía cruel de la educación secundaria, aquí se pone los guantes de látex y coge el escalpelo para diseccionar la jubilación y el vacío existencial que trae consigo. Puede que su mirada cáustica se halla ido suavizando con el tiempo y en sus siguientes películas Entre Copas (2004) y Los Descendientes (2011) muestra una cercanía mayor con sus personajes, ridiculizándolos menos, dejando sitio para la redención. Pero la acidez con la que ataca los pilares de la sociedad occidental en sus primeras películas es muuuuy divertida y acertada.


domingo, 19 de mayo de 2013

Ese Oscuro Objeto del Deseo


Cet Obscur Object Du Désir
Luis Buñuel, 1977


"Si te diese lo que quieres, dejarías de desearme"
Conchita

El cine de Buñuel sigue fascinando hoy en día. Su capacidad para tocar el nervio de las obsesiones humanas más perdurables es sorprendente y admirable. El deseo obsesivo, los celos enfermizos, la madurez sexual, el poder que ejercen la belleza y la juventud y otros temas apasionantes son tratados por el maestro aragonés desde las entrañas, con valentía, dejando que la intuición y el instinto se impongan sobre la razón. 

En ésta, su última película, nos cuenta la historia de un aristócrata, Mathieu, que se enamora de una joven criada llamada Conchita. La muchacha parece responder favorablemente a los intentos de Mathieu por conquistarla. Pero el deseo de poseerla nunca se llega a cumplir, lo que hace que Mathieu se obsesione cada vez más con ella. ¿Qué es lo que quiere ella? ¿Subir en el escalafón social, dinero, seguridad, una figura paternal? Mientras mantiene la llama del deseo del aristócrata, negándole una y otra vez el sexo, desapareciendo por temporadas, burlándose de él en ocasiones, Mathieu se vuelve cada vez más agresivo con ella. Y a medida que la trata peor, ella parece acercarse más. Buñuel cree que cuantos más desaires reciben las mujeres, más sumisas se vuelven. ¿Les gusta que les hagamos sufrir? Un poco sí.

Buñuel nunca deja claro si lo que vemos son escenas reales o pesadillas creadas por la mente perturbada del aristócrata. Tampoco parece haber ninguna lógica al hecho de que Conchita esté interpretada por dos actrices distintas, unas jovencísimas Ángela Molina y Carole Bouquet. En paralelo se retrata un mundo en el que la violencia causada por grupos terroristas crea una sensación de extrañamiento. Una obra maestra que consigue tocar las fibras más escondidas de la esencia humana. 

miércoles, 8 de mayo de 2013

Bug


William Friedkin, 2006.

William Friedkin, el director de Contra el Imperio de la Droga (The French Connection, 1971) y El Exorcista (1972) tiene casi ochenta años y está en buena forma a juzgar por sus últimas películas, aunque tanto ésta como Killer Joe (2011), han pasado desapercibidas por las salas españolas. 




Bug es una obra áspera, de personajes al límite, perdedores que no han superado experiencias traumáticas del pasado y que se refugian en su propia locura. Bug en inglés significa insecto, pero como verbo también es pinchar un teléfono, colocar micrófonos ocultos. 

La historia se centra en dos personajes principalmente. Agnes, una mujer alcohólica que intenta superar la pérdida de su hijo, y Peter, un perturbado que asegura ser perseguido por el gobierno. La soledad y el dolor que sufren los dos hacen que enseguida establezcan una relación enfermiza que terminará trágicamente. Peter cree ser víctima de un experimento del ejército en el que introducen en su cuerpo unos diminutos insectos, invisibles para cualquiera menos para él, y que se reproducen provocando unos picores insoportables. En su paranoia arrastra a Agnes y la convence para convertir su casa en una especie de búnker de aluminio. 

Friedkin filma una obra de gran tensión psicológica, donde el terror surge de los pozos más oscuros de la mente humana y que, a su vez, sirve al director para reflexionar sobre el control que ejerce la sociedad sobre el individuo bajo el pretexto de la seguridad.  Al mismo tiempo ironiza sobre las teorías  conspiratorias que cada vez están más enraizadas en el sentimiento popular y que muchas veces no son más que excusas para sobrellevar una realidad muchas veces insoportable.