lunes, 23 de mayo de 2011

Blue Valentine

Derek Cianfrance, 2010.


Drama romántico que se adentra en terrenos donde otras películas más complacientes y afables no lo hacen. Como ya ocurría con otra cinta reciente, (500) Days of Summer (Marc Webb, 2009), donde también se contaba un fracaso sentimental, nos deja un regusto agridulce. En ambas películas es la mujer la que pone el punto y final. Y es que los tiempos han cambiado también para el amor o para los roles masculino y femenino. Llevarle el desayuno a la cama o buscar un hotel para pasar una noche romántica ya no es suficiente para mantener a flote la relación.  La fortaleza ganada por el sexo femenino ha puesto en crisis un modelo de conquista que ya no funciona para el seductor tradicional. Y el cine actual reflexiona sobre cómo el sexo débil de este nuevo siglo, el hombre, se encuentra perdido ante unos nuevos patrones que no reconoce. 


Aquí, la historia de una pareja cuyo matrimonio parece ir a la deriva está narrada a través de una serie de flashbacks que contraponen los inicios de la relación, llenos de ilusión y pasión, con los momentos presentes donde la decepción y el tedio van ganando terreno, a pesar de los esfuerzos inútiles y desesperados del marido por recuperar la llama. Se deja entrever que quizás la chica nunca estuvo enamorada y que se dejó querer debido a su precaria situación, con un bebé no deseado por medio. Sin embargo, nada hace prever que la familia recién estrenada venga ya defectuosa de fábrica. 

Los dos personajes están construidos e interpretados magníficamente, sus sentimientos y motivaciones no son desvelados explícitamente, pero eso les da más profundidad y credibilidad ya que no siempre sabemos explicar con palabras lo que nos pasa. Si la chica se entregó a su conquistador como si se tratase de una tabla de salvación, puede que el chico confundiese un deseo de posesión casi obsesivo con el amor. Sea como fuere nos encontramos ante una obra compleja, que busca entre los recovecos del fracaso sentimental algo de verdad sobre la pareja del nuevo siglo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario